Gestionar los trámites para reservar un vuelo no es fácil, y, seamos honestos, nadie se preocupa de lo que comerá ese día.
Desde tragar un café hasta practicamente ingullir hamburguesas, todo el mundo en un aeropuerto tiene otra cosas en que pensar además de la comida.
Eso puede causar varias alteraciones gástricas durante el vuelo, lo cual puede dar lugar a momentos incómodos entre usted, la tripulación y los demás pasajeros.
¿Cuál es la solución?
Evite consumir lo que se elenca en la lista a continuación y contribuya a mantener su sistema digestivo bajo control durante el vuelo.
Los componentes de esta lista son seguros, y a veces incluso se recomienda su consumo regular, pero el cuerpo humano no ha sido designado para vivir en las altitudes alcanzada por los aviones: vigen reglas ligeramente diferentes cuando se está en los cielos.
En términos generales, evite esos alimentos a partir de unas cuatros horas antes del vuelo, o mejor a partir del día anterior. El sistema digestivo es impresionantemente minucioso a la hora de realizar sus funciones, y puede tardar de dos a ocho horas para digerir una comida adecuadamente.
Alimentos a evitar antes de un vuelo (a toda costa)
1. Coliflor
Esta es la única vez en la que es aconsejable evitar comer verduras.
La coliflor contiene mucha fibra, pero también contiene una buena dosis de azúcares complejos que, como ha sido demostrado, causan hinchazón en ciertas personas. Si eso se combina con la cabina presurizada de un avión, puede resultar bastante incómodo.
La familia de las verduras crucíferas entera contiene los mismos ingredientes básicos, así que es mejor extender la lista de los alimentos a evitar a brócoli, col, judías, coles de Bruselas y salvia de cocina.
Se sabe que en algunos casos las verduras crucíferas causan también calambres, así que hay que evitar esos alimentos antes y durante el vuelo. Por lo general se aconseja evitar comer fibra.
2. Café
Las cabinas de los aviones tienden a tener un bajo nivel de humedad, lo que puede causar una significativa deshidratación en los pasajeros. La cafeína es un diurético, que sólo acelerará este proceso. Como es de esperar, el café es una de las bebidas con la concentración más elevada de cafeína que la mayoría de nosotros consume durante un vuelo.
Esto vale también para el té con cafeína: acabará agotando la hidratación de su cuerpo por medio de innumerables visitas al baño.
La cafeína dificulta entrar en la fase REM del sueño, y abundates dosis de ella consiguen que hasta el sueño normal sea una hazaña.
Si no puede evitar absolutamente beber su café, asegúrese de ingerir suficiente agua para mantenerse hidratado durante el vuelo. Si se pregunta cuánta agua hay que beber, una opción segura es duplicar la cantidad de café que consumió.
3. Carbohidratos
Consumir alimentos que son difíciles de digerir, como los carbohidratos complejos, aumentará la tensión gástrica, sobre todo cuando el cuerpo humano está sujeto a cambios de temperátura y presión.
Si bien hay personas a las cuales esto no le afecta, es mejor prevenir que curar.
De forma similar, coma lo que coma, reduzca un poco las porciones, ya que tener el estomago lleno puede hacerle sentir incómodo durante el vuelo.
4. Alcohol y bebidas con gas
Aunque técnicamente no se trata de un alimento, es mejor evitar las botellas de licor antes y durante el vuelo.
Si tiene miedo a volar, puede que tenga la tentación de echarse un trago y una siesta, pero si se duerme no será un sueño con la fase REM. Así que podría despertarse sintiéndose más cansado que antes de dormirse.
El motivo es el mismo que el de la cafeína: al alcohol deshidrata a las personas incluso más rápido que el café. Además, los efectos del alcohol se magnifican y se refuerzan cuando se halla en el aire, por lo tanto, aunque su cóctel puede gratificarle momentáneamente, quizás acabe arruinándole el vuelo.
Imáginese bajarse de un vuelo con jet lag y una resaca tremenda.
Las bebidas carbonatadas también deben evitarse: están llenas de gas y burbujas, que no son una buena combinación con una cabina presurizada a más de 9000 metros de altura.
Los zumos de fruta y el agua son unos sustitutos apetecibles de su café, té y bebidas con gas.
5. Comidas picantes y goma de mascar
Al mascar chicle, está dejando entrar aire en exceso en su cuerpo.
Esto provoca una gran hinchazón y malestar. Expulsar gases mientras se tambalea de camino a casa es una cosa, pero es pura mala suerte para quien sea que acabe estando sentado a su lado en el vuelo.
Se sabe que la comida picante irrita el intestino, lo cual provoca gases y estreñimiento durante el vuelo, que estamos seguros que usted quiere evitar.
Además, se conoce que los alimentos picantes provocan acidez de estómago a corto plazo en la gente, y a nadie le gusta tener la garganta en llamas mientras no puede moverse del avión.
6. Ajo y cebolla
Aunque normalmente aportan muchos beneficios para la salud, tanto el ajo como la cebolla dan muy mal aliento.
Eso se hace aún más pronunciado en lugares donde el aire acondicionado recicla el aire de la cabina. Aunque se cepille los dientes, al terminar la digestión, el olor del ajo puede regresar más tarde subiendo por el esófago.
Es mejor evitarlos en sus comidas antes de un vuelo.
El nivel de temperatura, presión y humedad, además de las condiciones atmosféricas generales son muy diferentes cuando vuela que cuando está en tierra, lo cual puede desencadenar efectos adversos en alimentos que, en otras circunstancias, serían inofensivos e incluso saludables.
Ahora que ha sifo informado sobre los alimentos que debe evitar, puede centrarse más en las cosas importantes, como no perder su vuelo. Dado que el vuelo puede retrasarse o cancelarse, asegúrese de adquirir un seguro de viaje antes de emprenderlo. De este modo, podrá contar con una protección financiera para sus reservas prepagadas y no reembolsables, además de otras valiosas prestaciones.