Todos amamos viajar, pero no tanto volar. Pasar la mayor parte del día en un tubo metálico apretado no es una perspectiva atractiva. A veces, mientras está disfrutando de una siesta alguien se tropezará con usted de camino al baño. O el carrito de las bebidas le golpeará en la cabeza cuando está sentado en la fila del pasillo.
Hay muchas experiencias poco placenteras que pueden suceder en un vuelo. El propósito de este artículo es reducirlas. Si desea aprender a amar el vuelo, tiene que aprender los trucos de los viajeros frecuentes. Por ejemplo, elija el asiento correcto:
- Personas de talla grande: asientos de pasillo
- Pasajeros con niños: asiento de mamparo
- Los que duermen en viaje: asiento en ventanilla
- Viajeros nerviosos/que se marean: asientos sobre el ala
- Pasajeros altos: asiento de mamparo y en salidas de emergencia
- Pasajeros claustrofóbicos: asientos cerca de una puerta
Recuerde que no todos los asientos de mamparo se reclinan, así que podría quedarse a 90 grados por todo el vuelo. También, niños menores de 12 o 15 años (dependiendo la aerolínea) no tienen permitido sentarse en las filas de emergencia.
Sin embargo, elegir el asiento correcto es sólo la punta del iceberg. Siga leyendo para descubrir las mejores formas de disfrutar de su próximo viaje de larga distancia.
No elija lo demasiado barato
Aunque todos queremos ahorrar dinero, ser muy tacaño al reservar su vuelo puede causarle grandes molestias y dolores físicos, además de angustia.
Como regla general, los asientos más “incómodos” suelen ser más económicos en cualquier vuelo, así que pague un poco más para obtener una mejora. No estamos diciendo que derroche y elija una suite en avión, pero las diferencias entre básico y económico a menudo le sorprenderán.
Reserve lo antes posible
Algunas aerolíneas le permitirán reservar hasta un año por adelantado. Reservar muy temprano no sólo le garantiza elegir su asiento, también le permite ahorrar dinero.
Un estudio de Expedia descubrió que los mejores precios para vuelos se encontraban 57 días antes de la fecha del vuelo. Otro estudio de Expedia mostró que las personas que reservan más de tres semanas antes pueden ahorrar hasta un 30%.
Puede usar estos ahorros para gastar un poco más en las comodidades de vuelo, como elegir el asiento, o una mejor comida.
Sea honesto (y específico) con su agente de viaje
No diga: “quiero un asiento bonito” sino diga: “me gustaría un asiento en el pasillo en la parte delantera del avión si es posible”. Ser específico no le garantiza que obtendrá el asiento que quiere, pero es un obstáculo menos. Lo más probable es que si reserva temprano, tenga suerte.
Además, informe a su agente de viaje si sufre de alergias, si tiene problemas de movilidad, si necesita asistencia con silla de ruedas, u otros casos particulares. A menudo pueden ofrecerle esa asistencia sin costes adicionales.
Únase a un programa de fidelización
Incluso si no vuela todo el tiempo, unirse a un programa de fidelización tiene grandes beneficios. Intente usar la misma aerolínea siempre que pueda: esta industria recompensa la fidelidad de sus clientes como ninguna otra.
Uno de los beneficios de casi cualquier programa de viajero frecuente es poder elegir por primero los asientos en la mayoría de los vuelos. Podrá elegir cualquier asiento a bordo, incluso los premium.
Los beneficios no terminan ahí: con casi todos los programas de recompensas, obtendrá acceso complementario a las salas VIP de los aeropuertos de todo el mundo, embarque prioritario, asistencia de ventas prioritarias, e incluso comida, café, y en algunos casos, cócteles gratis.
El tipo de avión importa
No todos los aviones son iguales. Cada uno tiene sus ventajas e inconvenientes, así que investigue en qué avión estará volando.
Los dos tipos básicos de avión, de cuerpo estrecho y cuerpo ancho tienen grandes diferencias con respecto a la disposición de los asientos. En los aviones de cuerpo estrecho, típicamente tendrá un solo pasillo en el medio, así que las opciones de asiento son más limitadas. Los aviones anchos, como el Boeing 777 y el Airbus A350 tienen muchos pasillos, y diferentes cantidades de asientos en el medio. Los aviones más grandes como el Boeing 747 y el Airbus A380 incluso tienen varios pisos. El mejor asiento depende del avión en el que viaje. Consulte el mapa de asientos del avión si la aerolínea lo proporciona.
Sin embargo, es importante recordar que incluso si reserva su vuelo por adelantado, el tipo de avión puede cambiar a último minuto. Aunque debería consultar la información de su ruta de vuelo y tipo de avión, no confíe en ella, ya que puede cambiar.
Consejos al reservar los asientos
Consulte la tabla de asientos
A la hora de reservar las aerolíneas suelen brindan mapas con la disposición de los asientos , así que preste atención al elegir su asiento.
Pero tenga cuidado: no todos los asientos que se muestran con de ventanilla las tienen, ya que muchos aviones tienen más filas de asientos que ventanas. Esto causa una desajuste en la alineación entre algunas filas de asientos en el avión.
Puede obviar este inconveniente visitando el sitio SeatGuru, que muestra la información más precisa
disponible sobre cualquier avión, desde la colocación de los asientos y las ventanas hasta el ancho del asiento, espacio del apoyabrazos, y número de puertos disponibles para dispositivos digitales.
Evite zonas de tránsito intenso
Intente no elegir un asiento cerca de una zona con mucho tránsito. Esto incluye asientos cerca de los baños, cocinas, o mamparos. El movimiento constante de pasajeros y tripulación en estas zonas pronto resultará molesto.
Eligiendo un asiento lejos de estas áreas podrá evitar gran parte del ruido monótono, y disfrutar de un viaje más tranquilo. Hablando de tranquilidad, si desea un asiento con menos ruido, elija uno cerca de la parte frontal del avión: si se sienta enfrente de los motores, suele haber hay menos ruido.
Compre un seguro de viaje
Por eficiente y confiable que sea el viaje por aire, un retraso o cancelación de vuelo ocasional es inevitable. A veces, el mal tiempo o problemas mecánicos pueden causar poner en pausa su viaje. Los pasajeros frecuentes saben que la mejor manera de estar preparado para esto es teniendo un seguro de viaje.
Si su vuelo es retrasado o cancelado, su equipaje se pierde, o si se encuentra con cualquier otro tipo de percance de viaje que esté cubierto por su póliza, su seguro de viaje podrá darle una compensación. Esto le permite volar con la tranquilidad de saber que estará cubierto incluso si las cosas no salen como lo planeó.
Hágase amigo del personal de la aerolínea
Tanto antes como después de embarcar, es mejor ser amigable con los asistentes de vuelo y de puerta. Los asistentes de puerta pueden ayudarle fácilmente a resolver problemas relativos al asiento, e incluso tienen el poder de asignarle uno mejor o conseguirle el que desea.
Si vuela regularmente por las mismas rutas en la misma aerolínea, a menudo le atenderá la misma tripulación. Llevarse bien con ellos suele darle ventajas y beneficios adicionales en sus vuelos.
Aunque ser amigable con el personal de la aerolínea no es garantía de que recibirá una mejora, le dará la oportunidad de hacer nuevos amigos, y con suerte, mejorarle el día a alguien. Puede llevar esos sentimientos positivos con usted mientras embarca a su vuelo.
