La comida es uno de los muchos placeres de viajar. Algunos incluso viajan solamente para explorar la gastronomía del mundo. Aunque hoy en día la primera fuente de información suele ser internet, ¿se puede confiar en las opiniones en línea? En realidad, no.
Según un estudio de la Harvard Business School, cada estrella adicional en Yelp para un determinado restaurante aumenta sus ingresos de un cinco a nueve por ciento. Las personas, al igual que los negocios, aprovechan esto explotando el sistema de calificación.
Pero, como aficionado a la gastronomía, ¿en qué situación se encuentra? Créalo o no, el mundo funcionaba perfectamente bien antes de internet. Hay muchas maneras de encontrar buena comida en el extranjero sin buscarlas en Google primero. Lea esta guía para aprender cómo embarcarse en su próxima aventura culinaria.
Cómo encontrar los mejores sitios para comer en el extranjero
Utiliza las revistas de gastronomía de antaño
Revistas populares, como Bon Appétit, Gastronomica, y Eating Well llevan décadas exisitendo. La información que ofrecen sobre el panorama gastronómico local es solo la punta del iceberg: estas revistas son unas ricas fuentes de recetas, imágenes de comida para babear y guías prácticas. Algunas incluso tratan de prácticas de agricultura ecológica, cultura de la comida en el mundo, y los extraños mercados negros en torno a los alimentos exóticos. Sin duda serán un placer para un verdadero amante de la comida.
Vaya adonde van los lugareños
¿Viajar no se trata de crear una conexión? Acérquese a un local mientras hace turismo; pregunte a más de una persona. Si te paras en un supermercado, charla con el empleado del mostrador. Converse con el dueño del local cuando vaya a comprar suvenires. Lo más probable es que estarán más que contentos de compartir con usted su lugar secreto para comer.
Pruebe los mercados locales
Encontrará mercados locales en casi cualquier ciudad. A menudo repletos de delicias locales, estos mercados son un lugar ideal para comenzar su viaje gastronómico. Los mercados agrícolas y panaderías locales a menudo rebosan de productos frescos y comida local auténtica. Son además una excelente fuente de información sobre especialidades locales y los mejores restaurantes en el vecindario.
Vaya a las calles
Desde Mumbai a Miami, las ciudades son famosas por su comida callejera. Los humildes puestos de comida en las calles tienen la cocina más sabrosa, normalmente a precios modestos. Sin embargo, tenga cuidado con la higiene: Busque los signos reveladores de que los vendedores descuidan los protocolos sanitarios comunes. Entérese de lo que está comiendo: si algo le huele raro, haga preguntas y tenga cuidado.
Evite los restaurantes en los lugares turísticos
Hay pocas experiencias para cenar peores que un lugar que sea una “trampas para turistas”: los destinos turísticos populares suelen estar repletos de restaurantes abarrotados de gente, con precios excesivos y de baja calidad. Evite estos sitios a menos que no tenga otra opción.
Cuidado con las señales de advertencia
Un menú suele decir mucho sobre el restaurante: un gran menú con muchas imágenes brillantes de comida y precios ridículamente bajos (o altos) equivale a un desastre gastronómico. Si un restaurante sirve más de tres tipos de cocina, tenga cuidado, ya que es bastante difícil dominar uno. La comida que se muestra en el escaparate es otra cosa a evitar.
Sea aventurero
A veces, todo lo que hace falta para tener suerte es perderse: pasee por el barrio para descubrir joyas ocultas. Busque cafés poco llamativos escondidos en el interior de un callejón. Si encuentra uno, pida el plato especial del día y puede que le sorprenda gratamente lo que aparezca. Si no está satisfecho, busque la siguiente gran aventura.
Confíe en su olfato
Confiar en su nariz nunca está de más: a menudo puede llevarle a sitios sorprendentemente felices, especialmente en lo que se refiere a la comida
Si se enferma
Independientemente de lo cuidadoso que sea, probar un plato que no conoce en un nuevo país podría sentarle mal. Sufrir una intoxicación alimentaria o una reacción alérgica por un ingrediente inesperado podría causar que tenga que buscar atención médica. Si le sucede esto, procure tener un seguro médico de viaje o seguro de viaje. Una cobertura de seguro apropiada le permite recibir la atención médica que necesita, sin tener que pagar una enorme factura por su cuenta.
Pregunte al personal del hotel
El personal del hotel está hecho de lugareños, así que probablemente conozca muchos lugares para comer. Sin embargo, algunos hoteles pueden tener acuerdos con ciertos restaurantes locales, y sus consejos pueden estar a menudo manchados de favoritismos que no aportan nada a su experiencia gastronómica.
Pruebe un recorrido gastronómico
Hoy en día en muchas ciudades se pueden encontrar fácilmente guías que ofrecen recorridos gastronómicos. Es una forma divertida de conocer a otros viajeros, explorar zonas menos conocidas, y probar comida auténtica para chuparse los dedos. La comida es un tema perfecto para romper el hielo, en caso de que estar con desconocidos le incomode. Y cuando se mezcla con la historia local y una nueva cultura, se convierte en el cóctel de viaje perfecto.