Tanto si va a comprar como a vender una propiedad, contratar a un agente inmobiliario para que le ayude en el proceso suele ser una buena opción. Su experiencia en el sector puede ahorrarle mucho esfuerzo, evitar que se quede atónito ante la jerga legal y, además, encontrarle una buena oferta.
Pero todas estas ventajas pueden parecer insignificantes si las cosas no fluyen: no tener una buena dinámica de trabajo con su agente puede convertir todo el proceso en una pesadilla. Y lo que es peor, podría contratar al agente equivocado y ser estafado en el proceso.
Para ayudarle a evitar estas situaciones, hemos recopilado algunos consejos sobre cómo tratar con los agentes inmobiliarios en Estados Unidos, para que tenga una buena experiencia.
Un buen negocio comienza con la contratación del agente adecuado
Una relación agradable con su agente inmobiliario comienza antes de empezar a trabajar con él. Se trata de contratar al agente adecuado para sus necesidades, para que le consiga el trato adecuado.
Antes de buscar en Internet un agente inmobiliario, intente preguntar a su red de amigos y familiares si pueden recomendarle a alguien. La mejor manera de obtener una garantía de calidad es a través de una referencia de alguien que haya trabajado con ellos en el pasado.
Pero, si es nuevo en una ciudad y no tiene una red de contactos, anímese a buscar en internet agentes inmobiliarios locales.
Aquí tiene algunos consejos para encontrar el agente inmobiliario adecuado para usted:
- Asegúrese de que tienen una licencia válida para esa zona y que son miembros de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR) de Estados Unidos.
- Hable con varios agentes antes de decidirse por uno. Hágase una idea de su estilo, experiencia y de lo bien que parecen entender sus necesidades.
- Evite contratar a un agente inmobiliario después de haber hablado con él una sola vez. Investigue a fondo sus credenciales. Compruebe su sitio web, su presencia en las redes sociales y las opiniones que tenga en Internet.
- Asegúrese de pedirles referencias de otros clientes con los que pueda hablar. Pregúntales cómo fue su experiencia y si volverían a contratarlos.
- Explique claramente sus necesidades, objetivos y plazos cuando hable con ellos para entender si también son adecuados para usted.
Al buscar, tenga en cuenta también que no siempre el mejor agente de la ciudad es el que mejor se adapta a sus necesidades: busque un agente inmobiliario especializado en el sector que busca y que entienda su presupuesto y sus necesidades.
Cuanta más experiencia tengan en su zona, mejor podrán ayudarle a conseguir lo que busca.
Sea minucioso antes de firmar el contrato
Tradicionalmente, el vendedor de una propiedad paga los honorarios de los agentes del vendedor y del comprador. Estos honorarios suelen ascender a alrededor del 6% del precio de venta, dividido entre los dos agentes.
En general, debería tener claro el precio exacto de su agente antes de pasar a la fase de contrato. En cualquier caso, antes de firmar, tómese el tiempo necesario para examinar detenidamente su contrato. (¡Sí, todo el documento!)
- Revisa los términos y condiciones para que no te pillen desprevenido las tarifas o cláusulas ocultas.
- Además, asegúrese de la duración del contrato. Por lo general, se aconseja que el contrato tenga una duración máxima de seis meses. En los mercados más activos y competitivos, las casas se venden en unos 30 días. Un contrato más corto le permite cambiar de agente si no ha avanzado al cabo de un par de meses.
- Evite pagar una cuota de depósito. Algunos agentes intentarán cobrarle una cuota de inscripción por adelantado por contratarlos. Aunque puede parecer sensato tener una cláusula de este tipo, si no está bien especificada, puede ser utilizada en su contra. A veces, los estafadores se niegan a devolver esta fianza al final del contrato, incluso si no han podido encontrar una propiedad o un comprador adecuados. En general, es aconsejable no pagar a su agente una comisión hasta que haya encontrado la oferta que busca.
Una vez que haya comprobado todos estos detalles, vaya a firmar el contrato para empezar.
Qué esperar (y hacer) después de firmar un contrato
Ya sea que esté vendiendo o comprando, lo primero que debe hacer una vez que comience a trabajar con un agente inmobiliario es establecer la forma de comunicación: hágales saber cómo prefieren estar en contacto, y en qué momentos estará disponible para que se pongan en contacto con usted para enseñar propiedades.
Después de eso, dependiendo de la parte de la transacción en la que se encuentre, las pautas varían ligeramente.
Buenas prácticas de los compradores
La fluidez de su experiencia de compra de una casa depende de las habilidades de su agente tanto como de usted.
Como comprador, tiene que ser claro con su agente sobre su presupuesto, sus ubicaciones ideales, sus necesidades absolutas y lo que está dispuesto a negociar.
Cuando esté viendo propiedades, recuerde que el trabajo de su agente es ayudarle a inspeccionar la propiedad y negociar en su nombre. Ellos trabajan con el agente del vendedor para negociar el precio de la propiedad, y para cualquier reparación que ellos hagan.
Debe confiar en que hagan su trabajo, y no estar encima de ellos, pero aun así es conveniente que esté al tanto de cuáles son las negociaciones.
Después de cerrar el trato, asegúrese de inspeccionar la propiedad de nuevo por usted mismo, y lea las escrituras de venta cuidadosamente.
Su agente revisará las escrituras, y lo ideal es que usted también lo haga. Esté atento y lea los documentos para buscar cualquier sorpresa no deseada escondida entre líneas.
Prácticas de venta inteligentes
Si está buscando vender su casa, probablemente ya tiene un precio en mente. Sabemos que puede ser tentador atenerse a él, pero los agentes inmobiliarios tienen verdadera experiencia en la fijación de precios de las propiedades. Si ha hecho el esfuerzo de contratar a un agente, ¿por qué no tener en cuenta sus consejos?
Si bien es importante confiar en los expertos y dejar que hagan su trabajo, también es importante estar atento, para evitar conformarse con un trato que no sea bueno.
Manténgase al día de lo que ocurre cuando se enseña la propiedad. Pida a su agente que le informe de los avances que se producen a lo largo del periodo de venta.
Un gran agente le mantendrá automáticamente informado, pero si no lo hace, no dude en pedírselo. Esta forma de comunicación abierta evitará que se sientas frustrado, estando a oscuras hasta el día antes de la venta.
Todas estas “mejores prácticas” básicas deberían mantenerle seguro, y evitar problemas. Pero, este artículo no estaría completo sin una guía rápida para evitar el temido territorio de las estafas.
Las dos estafas más comunes (y cómo evitarlas)
1. Fraude de los agentes inmobiliarios: no revelar detalles
Los agentes sospechosos a veces intentan estafar a sus clientes a través de comisiones ocultas o préstamos añadidos que cuelan en los contratos.
Una señal de alarma a la que hay que prestar atención es si su agente parece estar tratando de impedir que usted revise el papeleo antes de firmar.
Evite este fraude, y muchos otros también, leyendo y entiendiendo cada papel que firme.
Si en algún momento no está seguro de para qué sirve un documento, pida a su agente que le aclare qué es y por qué es necesario. Si todavía le parece sospechoso, haga una búsqueda rápida en Internet, o consulte a sus amigos o familiares para ver si han firmado escrituras similares.
También, no deje que un corredor o agente añada otras partes a su transacción aparte del comprador o vendedor implicado.
Como comprador, no acepte hacer ningún pago adicional al vendedor por debajo de la mesa sólo para cerrar un trato. Acuerdos como ese suelen ser parte de un fraude de préstamo o de una estafa de “venta al descubierto”, y podrían hacerle partícipe de ello.
También, nunca le dé a su agente el dinero o el permiso legal para buscar un préstamo o una hipoteca en su nombre.
2. Fraude de ciberseguridad:
Más de 11.000 compradores cayeron en esta estafa solo en 2017, y las cifras han ido en aumento desde entonces.
Se trata de un tipo de estafa más reciente en la que los piratas informáticos acceden a las direcciones de correo electrónico de los agentes inmobiliarios y a los detalles de los contratos adjuntos. A continuación, envían al comprador detalles falsos de la transferencia para el importe del pago inicial o el coste de cierre desde una dirección de correo electrónico muy similar a la del agente.
Los estafadores llegan incluso a estudiar el estilo de escritura del agente, para que parezca la misma persona.
La mejor manera de evitar este tipo de estafas es comprobar cuidadosamente la dirección de correo electrónico del remitente que solicita una transferencia bancaria, y hacer un seguimiento cruzando siempre los detalles de la transferencia bancaria con su agente por teléfono o en persona, antes de realizar la transferencia.
Si ha sido víctima de alguna de estas estafas, informe inmediatamente a su banco y avise a la policía local.
En cualquier estafa que implique una transferencia de dinero, el tiempo es fundamental: cuanto más rápido se informe al banco y a la policía, mayores serán las posibilidades de recuperar su dinero.
Tenga en cuenta estos sencillos consejos y prácticas para tener una experiencia sin fallos con su agente inmobiliario y evitar caer en alguna estafa.